Yo, en el año 1977 cuando la encontré, apenas la vi, la bauticé como la Rana Dorada, porque al verla me dio la impresión como si estuviera bañada en oro. Hoy le dicen la rana dardo o rana lanza, pero son nombre que no se ajustan a la realidad. Porque la ranita no lanza nada, los indios que se encuentran a lo largo de la Costa Pacífica colombiana, la capturan y la colocan dentro de un tarrito de guadua cuando salen a cacería, la punta de la lanza o la punta del dardo le tocan la piel a la ranita para que se unte de la sustancia que le protege la piel a la ranita y que contiene una batracotoxina muy mortal.
Cuando la flecha o el dardo penetra en el animal al cual le dispararon, este cae rápido muerto.
Pero la ranita no lanza nada, solo, si usted la toca, por la piel del ser humano penetra la sustancia y hasta ahora que yo conozca no hay antídoto, los Ẽpẽrá preparan un brebaje a base de hierbas,con el cual ellos dicen que curan, no lo comprobé. (En el artículo del American Museum of Natual History, adjunto verá a los indígenas disparando y con el tarrito donde las echan cuando salen a cacería).
Para Llegar alli y encontrar a los Ẽpẽrá y la Ranita Dorada viaje hasta llegar a Guapi, allí tome una lancha que me llevó hasta Puerto Patia, son casi tres horas de viaje, por mar y río (según el motor de borda), allí se transborda a otra lancha y con un motor de pata corta, se aprovisiona de unas varas largas y fuertes por si el motor se apaga por el camino de la Quebrada Guanguí que es aproximadamente de una hora y la corriente no arrastre la lancha contra el peñasco y sabrá Dios que pueda acontecer.
La Rana Dorada no es agresiva, ni lanza la sustancia que protege su cuerpo, solo, si se toca la sustancia afecta al ser humano, los animales no se meten con ella porque tiene una coloración que se llama aposemática, esto es, que la coloración le advierte a los demás animales que si se meten con ella pueden morir. Al conocer sus efectos, lo comente sin haber realizado ningún trabajo químico, que este animalito poseía una sustancia muy tóxica, que protege su cuerpo, las personas se reían y cuando salió la publicación del Dr. Myers un año mas tarde (1978), confirmo la toxicidad de la batacotroxina.
Uno de los artículos de prensa que publico un periodista a raíz de que se extendió el conocimiento de que si era muy tóxico, lo Tituló “UNA MUERTE A CARCAJADAS”, porque la persona afectada por esta sustancia, le entran ganas de reír.
En la tercera vez de cinco que fui, ellos me divisaban a más de media hora de camino para llegar a la comunidad que es por el Quebrada Guanguí, yo veía que lavaban la entrada con agua limpia, cuando llegue percibí un aroma de perfume muy agradable por toda la comunidad de malocas, al rato después de compartir un rato con ellos, les pregunte que por que lavaron la entrada y para que era ese aroma tan agradable que se sentía en el ambiente. Me respondieron que yo ser amigo de ellos y que con ese acto de lavar la entrada me querían decir que Yo era bien venido a su casa y que el aroma era para que yo me sintiera agradado de compartir con ellos y la cacica me dijo que tenía que dormir en la maloca de ella, pero sin ella porque mi visita era un honor para ellos. Les pregunte de donde sacaban el perfume tan agradable y me dijeron que de una orquídea. Qué bello el detalle
Le cuento que como yo llevaba como siempre remesa, ellos comían de lo que yo preparaba, pero no me dejaban cocinar, yo le daba los granos y unas señoras de la comunidad los preparaba. Yo sentí curiosidad porque el grano se los daba en la mañana y después de mediodía estaban blandos para comer, el arroz no es problema, pero el fríjol, alverja, garbanzo, les pregunte como lo ablandaban. Se rieron, me mostraron la pitadora o sea la olla a presión, nos soltamos la carcajada. Otro rato les cuento como les conseguí un motor y porque.
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